Con Palometas y bolleta, así se despide a la Semana Santa en Alcañiz
Las Palometas se llevaron este domingo la Semana Santa de Alcañiz. Son pocos, aunque cada vez más, los curiosos que acuden a la calle Espejo al mediodía para ver cómo se introducen las palomas en la mangrana de la Virgen del Carmen.
La peana de la mangrana que contiene a la Virgen parte de la iglesia del Carmen y hace una parada en una vivienda de la calle Espejo para introducir a las palomas -cada año varía el número- y trasladarlas en procesión hasta la plaza de España, a pocos metros de la vivienda.
Allí, Vicente Dobato, en representación de la Cofradía del Carmen, tira de un cordel para abrir la mangrana, descubriendo a la Virgen y a las palometas, que vuelan al cielo simbolizando la resurrección de Jesucristo.
La peana se lleva abierta a la iglesia Santa María la Mayor, donde la Virgen se corona y vuelve a partir en una corta procesión que desemboca en el Ayuntamiento, en donde se despide a los representantes municipales, que también participan en el desfile.
El lunes de Pascua es tradición en Alcañiz ir a merendar “la bolleta”, un pan dulce con huevo duro, al campo o a los masicos con grupos de amigos o en familia.