El comercio bajoaragonés sufre y se reafirma
Hasta este lunes, cuando han entrado en vigor las nuevas normas para el sector empresarial, que afectan todavía a más empresarios, según datos de la Cámara de Comercio de Teruel, en el Bajo Aragón el sector de la agroalimentación trabajaba al cien por cien, el de la construcción entre el ochenta y el noventa por ciento, el de automoción solo con guardias, sin practicar apenas reparaciones y sin ventas y el de la hostelería y el turismo al cero por ciento.
En el sector de la industria, las ventas habían caído en un 80%.
El ambiente, según el presidente de la Cámara de Teruel, Antonio Santa Isabe, está “revuelto” y en el Bajo Aragón hay varias empresas que han solicitado Expedientes de Regulación Temporal de Empleo. No obstante, el presidente indicó que una cosa es que se soliciten y otra que entren, porque no todas tienen por qué entrar en los cortes según los requisitos que marca el gobierno, pese a que pudieran encontrarse en el límite.
Santa Isabel indica que es necesario que las administraciones, incluyendo Ayuntamientos, establezcan medidas como la eliminación reducción de tasas por varios años, ya que se trataría de una “inversión”, porque para las empresas estas ayudas podrían suponer no tener que cerrar y podrían continuar creando riqueza y empleo en la zona.
Además, desde la Cámara de Comercio consideran que esta crisis debería hacerse replantear a los bajoaragoneses comprar en el pequeño comercio que, hoy en día, es el que está abasteciendo a quienes viven confinados en pueblos donde no llegan las cadenas de supermercados.