Comienza la reparación del convento de San Agustín de Caspe
El convento de San Agustín de Caspe, conocido como de “los Franciscanos”, ha comenzado a ser reparado.
Las obras se centran en las cubiertas del convento y la alzada del claustro para eliminar los problemas estructurales y de humedad existentes en este edificio del siglo XVII.
El edificio se fundó en 1617, la iglesia se concluyó en 1623 y el claustro y sus dependencias, a lo largo del siglo XVII.
Todo el conjunto, tras la desamortización de los bienes propiedad de la iglesia en 1835, pasó a ser propiedad municipal, aunque parte de las dependencias y la iglesia volvió a la comunidad de Franciscanos, que regentó el convento desde 1889 hasta su retirada en 2015.
La primera fase de las obras cuenta con un presupuesto de 217.679 euros procedentes de una subvención y los trabajos son gestionados por el Ayuntamiento, desde donde explican que “el proceso de rehabilitación de este edificio ha sido objeto de varias actuaciones de las Escuelas Taller de Caspe que han intervenido en el claustro, en el antiguo huerto transformado en jardín público y con diversos trabajos de pavimentación y de instalaciones eléctricas”.
Una vez finalizadas todas las fases de rehabilitación, el convento será destinado a usos de carácter cultural, educativo y social.