Llueve
El fin de semana comenzó con un tímido asomo de la lluvia y terminó lloviendo con ganas, especialmente en municipios como Híjar, Valderrobres o Castellote, donde se registraron alrededor de 20 litros en cada uno de ellos.
En Híjar cayeron en menos de una hora, entre las tres y las cuatro de la tarde. Hubo que cortar al tráfico, por precaución, la carretera A-224, que se inundó en una parte en la que confluyen varios accesos agrícolas. Este problema es habitual cuando llueve con intensidad, indicó el alcalde, Jesús Puyol.
La carretera nacional N-232, en el término de Azaila, a 11 kilómetros de Híjar, se inundó parcialmente, sin llegar a cortarse al tráfico, al menos hasta las ocho de la tarde.
Los operarios de la Diputación intervinieron en la carretera TE-V-3005 a Ráfales debido al granizo caído sobre la calzada. También actuaron en la TE-V-3001 a Torre del Compte por pequeños desprendimientos, debido a la lluvia.
El cereal de secano ya está perdido en el Bajo Aragón, porque las plantas ya han muerto por la falta de lluvias. El agua será bien recibida por los pantanos, los ríos y los regantes.