Cuando las palabras cobardía y miedo se cambian o intentan cambiarse por eufemismos como: "empatía", "amabilidad" y "simpatía".
Nos agreden y ponemos la otra mejilla, superguay!
Aquí observando un vídeo en el que la policía procede, en el mismo centro de París, a escoltar a ciudadanos parisinos, que libremente han querido acudir a una iglesia católica a celebrar la tradicional Misa del Gallo, para evitar que a alguna cuadrilla de islamistas violentos, -que no lo son todos, pero algunos sí-, no se les ocurriera sacar la navaja o alguna bomba y perturbar la paz de esa Noche, cosa que está siendo ya demasiado habitual en barrios o lugares de muchas ciudades europeas.
¿Pero qué diablos está pasando que hasta tenemos que andar escoltados y protegidos para practicar nuestras costumbres y hacerlo hasta con miedo y sin la libertad y tranquilidad con que lo hacíamos hasta hace cuatro días?
Europa está yéndose literalmente al garete y tomada "por el pito del sereno", mientras tanto, los europeos procuramos ser empáticos, simpáticos y risueños con quienes la están hundiendo.
Nuestros valores europeos basados en el legado cristiano y en la filosofía grecorromana, se hunden, y mientras tanto, nosotros aplaudiendo cómo este multiculturalismo acelerado, en lugar de ser tranquilo y de manera adaptativa y paulatina, llega arrasando e intentando cambiar nuestras costumbres por otras muy distintas para nosotros y observando impasibles cómo las políticas migratorias suicidas, van a contribuir a destrozar nuestra cuna, como cayera el Imperio Romano a manos de las hordas Bárbaras.
Tan sólo algunos países como Polonia y Hungría, que tienen la piel escamada de haber sufrido sus horrores más recientemente, están intentando hacer frente valientemente al problema y son los únicos que parecen darse cuenta de esta pesadilla. Por eso mismo, son tildados de homófobos y racistas, todo porque no entran y se rebelan contra los planes del círculo de colores de la Agenda 20-30.
Y, qué casualidad!, hasta ví lucir ese pin circular y de colorines en la solapa del rey de España, Felipe VI, en la Cumbre del Clima para recibir a los Jefes de Estado Europeos.
A veces los españoles confundimos el ser buenos con ser tontos.
¡¡¡Tamos piraos y pillaos del tó!!! ¡¡¡A disfrutar mientras se pueda que vienen torcidas!!!.