Medio ambiente
La institución comarcal del Bajo Aragón ha instalado zonas de compostaje comunitario en ocho municipios. Están destinadas a separar en origen los residuos que normalmente se depositan en los contenedores verdes: restos de frutas, verduras, cáscaras de huevo o comida, del resto para su posterior transformación en compost.
Desde la institución comarcal señalan que con este sistema “se reduce la cantidad de residuos que se gestiona en el vertedero de la Agrupación nº.7, lo que supone un ahorro económico respecto a tasas de depósito. Al disminuir la frecuencia en la recogida del contenedor verde también habrá menos camiones circulando por las carreteras. Y, por tanto, baja el consumo de combustibles y emisiones. Además, de forma paralela, se aumenta la cantidad y se mejora la calidad en la recogida selectiva de envases, papel y cartón y vidrio. Lo que se traduce en un mayor ingreso para la Comarca.
Y, además, todo ello tiene un beneficio ambiental muy importante, transformando los residuo en un nuevo producto, que es el compost, que puede ser utilizado como fertilizante tanto a nivel doméstico como a nivel agrícola”.
Las obras y el suministro de estas áreas ya esta finalizadas, pero el proyecto de compostaje comunitario empezará en septiembre “apoyado de una campaña de concienciación y sensibilización a la ciudadanía”, indican desde la institución, de la que se encargará una empresa.
La institución entregará a los ocho municipios 3.000 cubos marrones de 10 litros para compostaje comunitario y 216.000 bolsas compostables de 10 litros. También está previsto contratar a trabajadores “para garantizar el buen funcionamiento y cuidado de estas áreas de compostaje”.
Esta práctica lleva años funcionando en el Matarraña.
Hay auténticos expertos en aves entre los niños bajoaragoneses. Las jornadas de naturaleza que lleva años organizando la asociación de Amigos del Río y de los Espacios Naturales de Alcañiz calan en los más pequeños, que amplían sus conocimientos año a año, pues son muchos los que repiten en estas actividades sobre flora y fauna, especialmente sobre aves.
Este fin de semana hubo un recorrido guiado, un taller de huellas y un anillamiento científico de pájaros en La Estanca de Alcañiz.
La tarde del sábado los participantes, adultos y niños, recorrieron el camino que une el camping con uno de los observatorios, mientras recogían la basura que encontraban a su paso y observaban el paraje y las aves del embalse a través de la mirilla de un telescopio terrestre, como una hembra de pato colorao con sus catorce patitos o los carriceros, unas aves rojizas a las que da su nombre su escondite, el carrizo. Al finalizar el recorrido, los niños pudieron reproducir huellas de diferentes animales con escayola.
La mañana del domingo se dedicó al anillamiento, que consiste en colocar una placa metálica con datos en las patas de las aves para estudiar sus desplazamientos. Las aves se capturan durante la noche y la mañana con unas redes transparentes colocadas en su camino y mientras se anillan se aprovecha la ocasión para explicar sus principales características, rutas y costumbres.
Santiago Osácar se encargó, como otras veces, de este anillamiento didáctico que mantiene boquiabiertos y entregados a los más pequeños mientras observan a las aves de muy cerca e, incluso, las sostienen unos segundos y las liberan, respondiendo, algunos resabidos, a las preguntas del naturalista.
A veces, las aves se encuentran ya anilladas, en ocasiones marcadas en otros países. Curiosamente, el domingo apareció un agateador, un pájaro que trepa por el tronco de los árboles que había sido anillado por el mismo Osácar el pasado invierno en la ribera alcañizana. Así se supo que había preferido mudarse ahora a La Estanca.
También se prestaron a esta actividad el gorrión, el carricero, la curruca, el carbonero, el herrerillo, el zarcero, el ruiseñor, el ruiseñor bastardo y el pequeño y colilargo mito. Hubo bebés, mamás y papás pájaro. Los progenitores se dejaron ver bastante despeluchados, es lo que tiene la crianza, que agota. Así lo explicó Santiago Osácar mientras sobre el agua de La Estanca se volvía a dejar ver la misma hembra de pato colorao con sus catorce patitos avistada el día anterior por los Amigos del Río y demás amigos.
Caja Rural de Teruel impartirá una charla informativa el próximo miércoles, 14 de junio, en Valderrobres para dar a conocer la solución que ha diseñado en la aplicación del Cuaderno Electrónico Digital.
Comenzará a las 19:00 h. en el salón de la Comarca del Matarraña.
Desde la cooperativa de crédito turolense explican que “el CUE (Cuaderno Electrónico o Digital) va a ser en breve una herramienta necesaria en las explotaciones agropecuarias que, dependiendo de su dimensión, tipo de ayudas o características, tendrán que cumplimentar progresivamente a partir del 1 de Septiembre”.
En la charla, indican “se pondrá de manifiesto la realidad digital, cómo afrontarla, la aplicación y servicio, así como la resolución de las dudas que se están detectando en plena campaña PAC, debido a la multitud de informaciones y cambios que se suceden constantemente”.
No quieren que la minería de arcilla afecte a su patrimonio natural, como los acuíferos o las fuentes, además de a las carreteras por las que transitan los camiones que las transportan.
Son vecinos de municipios del Bajo Aragón, Maestrazgo y Cuencas Mineras en los que hay arcilla y donde existe esta preocupación, que acaban de constituir la “Plataforma de afectados por la minería en Teruel”.
Proceden de Abenfigo, Alcorisa, Berge, Castellote, Cuevas de Cañart, Dos Torres, Ejulve, Estercuel, Ladruñán, Mas de las Matas, Molinos, Santolea y Seno y cuentan con el apoyo del colectivo Sollavientos, la Plataforma a favor de los paisajes de Teruel, comunidades de regantes y asociaciones culturales, preocupados todos “por la evolución de estas dañinas explotaciones de arcilla”.
Se reunieron para tratar sus preocupaciones y organizarse el pasado sábado y acordaron volver a reunirse a principios de julio.
La Asociación de Amigos del Río y los Espacios Naturales ha organizado para el próximo fin de semana, 10 y 11 de junio, unas jornadas abiertas a cualquier persona interesada en la flora y la fauna de La Estanca de Alcañiz.
Las actividades comenzarán el sábado a las 18:30 h. junto al camping, desde donde partirá un recorrido guiado sobre las características de las numerosas especies de aves y plantas del paraje.
Al finalizar el recorrido, el mismo guía impartirá un taller de huellas de mamíferos y de aves en el camping.
A las 22:30 h. si no hay nubes, representantes de la Agrupación Astronómica del Bajo Aragón, con sus potentes telescopios, guiarán a los asistentes en la observación de estrellas, constelaciones y planetas.
El domingo, se podrá conocer a las aves de muy cerca, aprovechando el trabajo de anillamiento que realizará una persona autorizada por la Sociedad Española de Ornitología y consistente en el marcaje de las aves para permitir su seguimiento en los diferentes lugares a los que viajan.
Para su captura se usarán unas redes transparentes, conocidas como “japonesas” y entre la colocación de unas anillas en sus patas y su liberación se darán explicaciones sobre sus características.
Desde la asociación explican que el anillamiento científico “ayudará a conocer los comportamientos, características y rutas migratorias de las especies de aves más comunes de este entorno. Los conocimientos extraídos de estos anillamientos, una vez compartidos con los expertos que a nivel europeo y mundial, realizan las mismas tareas, ayudarán a mejorar la información sobre los ciclos anuales de las aves reproductoras, invernantes y migradoras en nuestro país”.
No es necesaria la inscripción a las actividades, basta con asistir.
El avistamiento de la gaviota de Sabine o gaviota de cola hendida (xema sabini) el pasado 28 de mayo en La Estanca de Alcañiz ha sido registrado como la primera cita de presencia de esta gaviota en Aragón.
Su primer observador en el territorio ha sido Javier Vera Cabrera y su primera fotógrafa Esther Yera.
Se trata de una gaviota de pequeño tamaño que vive en el norte de Canadá, Alaska y Groenlandia durante el verano y que pasa el invierno en los mares de Sudamérica, del oeste de Europa y África. Es difícil observarla, pero Javier y Esther tienen buena vista, pues han detectado en otras ocasiones la presencia de aves nada frecuentes en esta zona.
Agentes para la Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón han recogido una nutria muerta en el río Guadalope, a su paso por el tramo urbano de Alcañiz, para su traslado al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de La Alfranca (Zaragoza), donde se le practicará la necropsia.
“Conocidas las causas de la muerte, podemos intervenir para que no vuelva a suceder”, indican desde la Asociación de Agentes para la Protección de la Naturaleza, quienes agradecen la colaboración ciudadana que dio aviso del animal muerto.
En el tramo urbano del río en Alcañiz no es difícil ver rastros de nutria, como los excrementos con cangrejos triturados que depositan en las rocas para marcar su territorio.