Sucesos
La Audiencia Provincial de Teruel ha condenado a dos años de prisión a dos hombres, I. H. y T. B., ambos de nacionalidad rumana, por el robo de tractores en diferentes poblaciones de Teruel y Navarra. Dos de estos robos se cometieron en Valmuel el 6 y el 7 de octubre del año 2011.
Según se indica en la sentencia, los dos hombres, que actuaron en equipo, acudieron de propio a esta pedanía de Alcañiz para cometer los robos.
Entre la noche del día 6 y la mañana del 7 rompieron la cerradura del acceso a una finca privada y se apropiaron de un tractor de la marca FENDT FAVORIT 818 VARIO, que fue recuperado en Rumanía y entregado a su dueño. El vehículo tenía pala elevadora y en su interior había una máquina niveladora y dos ordenadores de control de la empacadora, no recuperados y valorados conjuntamente en la cantidad de 16.000 euros.
Entre la noche y la mañana siguiente regresaron a Valmuel y accedieron a una nave agrícola saltando un muro de tres metros de altura. De allí se llevaron un tractor de la marca JOHN DEERE 7830 y que fue valorado en 92.000 €, que fue recuperado y devuelto a su dueño.
Se les considera autores de de un delito continuado de robo con fuerza en las cosas, con la circunstancia atenuante de dilaciones indebidas. Además de la pena de prisión, deberán indemnizar con 16.000 euros al primer vecino de Valmuel por el material que le robaron y que no fue recuperado.
También deberá hacerse cargo cada uno de la mitad de las costas procesales causadas.
La sentencia es firme, ambas partes han manifestado la voluntad de no recurrir.
Alcañiz tiene varios edificios abandonados, públicos y privados, cuyo mal estado presenta un riesgo para viandantes y casas particulares. Es el caso del antiguo centro joven de los Torreones, la Torre de Palos o la antigua fábrica de chocolate Díaz.
Este último edificio, ubicado en la calle Escolapios, presenta desde hace años un estado ruinoso, lo que está afectando a quienes moran las casas que lindan con él.
Una de las vecinas afectadas sufre humedades a consecuencia del mal estado de la antigua fábrica y asegura que lleva años trasladando el problema al Ayuntamiento, quien es responsable, de que el edificio se mantenga en condiciones pese a ser de propiedad privada.
Además de las humedades, lo que preocupa a los vecinos es que el edificio se caiga y dañe sus viviendas.
Por ello, la citada afectada trasladó el problema al alcalde, Ignacio Urquizu, en el acto de recepción de los alcañizanos ausentes, celebrado el pasado mes de septiembre y en el que es tradicional trasladar públicamente asuntos sobre el estado de la ciudad.
Allí, Urquizu dijo a la vecina que presentase una instancia en el consistorio y que así su petición sería atendida: “si usted cree que hay una amenaza de derrumbe comuníquelo al Ayuntamiento y, si es así, le decimos a la familia que lo tienen que reparar. Si no lo hacen, lo derruye el Ayuntamiento y le pasa la factura a los propietarios”.
Siguiendo las instrucciones del alcalde, la afectada presentó tal instancia hace unos tres meses y, según aseguró a Bajo Aragón Digital, todavía sigue sin respuesta tanto ella como cualquier tipo de solución al problema.
Bajo Aragón Digital preguntó a Ignacio Urquizu el pasado jueves cómo tiene previsto actuar el Ayuntamiento ante esta situación, pero tampoco ha obtenido respuesta.
Ya en el año 2017, Ganar Alcañiz, cuya concejal María Milián forma parte del actual equipo de Gobierno (IU), denunció que “importantes elementos singulares de nuestro patrimonio”, entre los que citaba a la fábrica de chocolate, “permanecen en absoluto abandono”.
Si el pasado dos de enero unos ciudadanos rescataron a un cernícalo vulgar herido en las proximidades de la avenida de Zaragoza de Alcañiz, el pasado fin de semana otros ciudadanos dieron aviso a la Policía Local de la existencia de un perro que vagaba con lesiones cutáneas y al que, tras su inspección, no se le localizó microchip.
Los agentes se encargaron de encargaron de gestionar el traslado al veterinario del perro, de raza Border Collie. Este tipo de perros destacan por su facilidad para ser entrenados y se emplean habitualmente para trabajar con rebaños de ovejas.
La Policía agradeció la colaboración ciudadana que permitió el rescate del animal.
Un conato de incendio se ha producido este miércoles por la mañana junto a la carretera de El Corcho de Alcañiz, en la parte del talud que da a la ribera.
La Policía Local recibió la alerta y fue quien avisó a los Bomberos, cortando la vía y regulando el tráfico durante la intervención.
Todo apunta a que el origen sería alguna colilla encendida.
Una caseta de obra y dos vehículos han ardido en la madrugada de este 1 de enero en la calle Pescarranas de Alcorisa.
El aviso ha sido recibido a las 2:55 h. y en su extinción, que ha finalizado a las 4:40 h., han intervenido un oficial y dos bomberos con camión del parque de Alcañiz.
La Guardia Civil, que investiga el suceso, indicó este miércoles por la noche que todavía se desconocía el origen del incendio.
La plantilla de la Policía Local de Alcañiz está tan justa que “no se puede dar el servicio”. Lo asegura el concejal de Seguridad Ciudadana, Kiko Lahoz, lamentando que “no llegamos”, “es imposible”.
No hay patrulla durante la mayor parte del día, por lo que en muchas ocasiones vecinos llaman a la Policía requiriendo sus servicios y reciben la respuesta de que solo hay un agente que debe permanecer en comisaría, por lo que no hay efectivos de calle.
Para que pueda haber una patrulla es necesario que haya tres agentes por turno: dos de calle y uno en comisaría.
La situación lleva años así y, pese a que el alcalde anunció que el problema se había paliado con la incorporación de agentes en prácticas, lo cierto es que los problemas han continuado y ahora han empeorado, puesto que los de prácticas ya no están.
Estuvieron unos dos meses de prácticas, lo que tampoco resolvía el problema, puesto que no podían ir armados y debían actuar en compañía de profesionales. Ahora no están en Alcañiz, sino completando su formación en una academia y, según Lahoz, no regresarán hasta febrero.
Según Lahoz, es posible que se incorpore un agente en enero, por movilidad, desde Escatrón y hay convocada una plaza de subinspector de Policía cuyo trámite va para largo, dijo el concejal.
No hay ninguna otra previsión, indicó Lahoz, para hacer frente a este problema de falta de seguridad.
Recordamos que en ocasiones los agentes de Policía deben colaborar con la Guardia Civil, ya que el cuartel de Alcañiz está cerrado por las tardes.
Si el pasado lunes aparecía encintado el paseo del cerro Pui Pinos que conduce al mirador de Los Aires, este martes había otro paseo con cintas que cortaban el paso.
El motivo: árboles secos caídos o a medio caer, un problema que vecinos habían advertido que pasaría debido al estado tan seco de la vegetación del cerro por la falta de riego desde hace años.
La única medida que se tomó, al menos hasta este martes por la noche, fue la colocación de las cintas de plástico para disuadir el paso, pero no se retiraron los árboles, que no llegaban al suelo porque apoyaban en otros árboles, con el riesgo que eso conlleva.
Las cintas se han colocado en zonas en las que ya hay ejemplares desarraigados, pero existen nuevas zonas, sin encintar y sin ningún otro tipo de aviso, con árboles secos que podrían caer en cualquier momento.
Desde que se produjo el derrumbe del parte del cerro sobre varias viviendas de la carretera de El Corcho el cerro no se ha regado. Ni siquiera aquellas partes alejadas de la zona del suceso.